Sentidos del caballo

Nicole Quesada Pérez

El estudio del alcance que tienen los sentidos de los animales brinda información muy relevante en cuanto a su etología y, por consiguiente, dicho conocimiento es la base para aplicar o crear herramientas que permitan el manejo adecuado de los mismos (García, 2018).

Vista

Como dato curioso, los caballos son los mamíferos terrestres con los ojos más grandes en el mundo (Valero & Martín, 2019). Además, tienen una visión dicromática, es decir, que perciben 2 colores, donde destacan los tonos azul-grisáceos y amarillos (López, 2017).

Figura 1. Comparación entre la visión tricromática humana y la dicromática equina (Simó, 2023).

Figura 2. Alcance de la visión monocular y binocular de los caballos (Simó, 2023).

Lo anterior se explica porque estos animales son incapaces de distinguir entre el rojo y el verde. Esto debido a que en la retina del caballo existen 2 tipos de conos: los que absorben longitudes de onda corta de alrededor de 428 nm, para el color azul; y los que absorben longitudes de onda media y larga de 539 nm, para el rojo y verde, sin diferenciarlos (Jorge, 2021).

Ahora, los caballos tienen una visión nocturna incluso mejor que la de los humanos (Prado, 2009), y su alcance en esta especie radica en que la retina tiene una mayor cantidad de bastones, los cuales son los encargados de la visión nocturna, en comparación a los conos, los cuales son los responsables de la visión diurna (Jorge, 2021). Sumado a esto, influyen el gran tamaño de la córnea, junto con el hecho de que cuentan con pupilas horizontales (Prado, 2009). Los conos y bastones hacen referencia a células fotorreceptoras que hacen posible la visión (García, 2018).

Por otro lado, es de interés conocer que los caballos tienen mayor facilidad para observar objetos cercanos, pero no a la distancia (Jorge, 2024). Asimismo, debido a que naturalmente son animales presa, tienen un campo de visión muy amplio, cercano a los 350°. Esto aclara la importancia de emplear movimientos suaves y con velocidad constante al realizar su manejo, ya que de lo contrario se puede provocar estrés y nerviosismo debido a la asociación con el comportamiento de un depredador (Prado, 2009). De igual forma, este animal cuenta con 2 puntos ciegos de los cuales las personas deben procurar mantenerse alejadas para evitar que este se asuste (Ortuño, 2020).

Figura 3. Zona de fuga, puntos ciegos y punto de equilibrio de los caballos (Ortuño, 2020).

El conocimiento de la zona de fuga es fundamental para el manejo de ciertas especies, entre ellas el caballo. Básicamente, la zona de fuga es el área en la cual el animal siente confort, y por lo tanto, si se entra en dicho espacio, se genera que el mismo se desplace, por lo que es una técnica muy utilizada para movilizar a los animales sin generarles un estrés. Dicha técnica se basa en entrar a la zona de fuga y utilizar el punto de equilibrio, el cual se encuentra en la zona de la cruz. Si el propietario requiere que el animal avance, colocarse detrás del punto de equilibrio causará que este se mueva hacia adelante (Ortuño, 2020).

Los equinos necesitan tiempo para adaptarse a los cambios de iluminación, además de contar con poca percepción de profundidad en las imágenes (Ortuño, 2020), debido a la prevalencia de la visión monocular. También, con el objetivo de un mejor enfoque, los caballos levantan la cabeza para ver a la distancia y la bajan para ver de cerca, aspecto que nuevamente debe ser considerado para el correcto manejo (Prado, 2009).

Gusto 

Figura 4. Hocico equino (Bascuñana, 2019).

Tienen preferencia hacia los sabores dulces (García, 2018), y aceptan los salados. Pueden identificar el sabor amargo, lo cual es de utilidad para evitar el consumo de plantas o en general alimentos tóxicos (Tula, 2011). McBane (2012) indica que el sabor ácido es de igual forma detectable y que la selección de alimento va a estar relacionada con el sabor, textura y olor que este posea. Esta información es particularmente importante para brindar dietas adecuadas a estos animales. 

Olfato

Una de las funciones que cumple el olfato es permitir la socialización tanto entre los individuos de su misma especie como con otras especies. Estos individuos acercan sus narices para detectar el olor y frecuencia respiratoria del otro animal, igualmente el vínculo madre- cría tiene como base el olfato (Tula, 2011).

Los caballos cuentan con el órgano vomeronasal o de Jacobson, el cual tiene como función la captación de mensajes transmitidos mediante feromonas, los cuales pueden ser miedo, etapa reproductiva, territorialidad, alguna alerta, etc. Para una mejor captación de las feromonas los caballos suelen realizar el reflejo de Flehmen. Lo anterior se debe considerar para evitar reacciones alteradas en los animales, por ejemplo, al hacer uso de camiones que no tuvieron una limpieza adecuada y llevan consigo olores de otros caballos (Werner et al., 2022).

Figura 5. Reflejo de Flehmen (Aggro, 2024).

Por otra parte, el olfato está muy relacionado con el consumo de alimento, ya que el punto ciego frontal no permite visualizar exactamente lo que están ingiriendo, así que este es el sentido que permite el reconocimiento y elección del material a ingerir (Tula, 2011).

Oído

Sus orejas tienen una gran cantidad de músculos que les brindan mucha movilidad, de hasta 180° (Werner et al., 2022), donde los mismos son capaces de detectar sonidos tanto de alta como baja frecuencia, por lo que tienen una mejor audición que los humanos, y adicionalmente, pueden localizar la fuente de estos. Tal movilidad puede ser independiente para cada oreja, lo que permite una percepción de múltiples sonidos simultáneamente (Moriello, 2019).

De nuevo, los caballos siempre están en alerta por ser animales presa, por lo que sonidos fuertes o repentinos pueden desencadenar nerviosismo o respuestas de huida, lo cual es potencialmente peligroso tanto para el cuidador como para el animal (Werner et al., 2022).

Figura 6. Orejas equinas (Pixabay, s.f.).

Las vocalizaciones como el relincho se utilizan para la comunicación, y dependiendo del tono de estas pueden tener distintos significados. Adicionalmente es posible que se realicen sonidos con los cascos y estos podrían derivarse del nerviosismo, aburrimiento o una situación de amenaza (Aira e Ibáñez, 2013).

Mediante la voz, los caballos son capaces de reconocer a las personas, así como diferenciar el estado de ánimo que presentan. En caso de querer brindar un comando al animal, los sonidos simples y claros son la mejor opción (McBane, 2012).

Tacto

De igual manera, el tacto en los equinos tiene como principal objetivo la formación de vínculos sociales con su grupo, sobre todo mediante el acicalamiento, el cual a su vez también puede tener un efecto relajante (Aira e Ibáñez, 2013). Paralelamente, este sentido es esencial para que los propietarios formen un vínculo y se comuniquen con sus caballos (Werner et al., 2022).

Los equinos cuentan con receptores de presión, temperatura y dolor distribuidos en toda la superficie corporal, sin embargo, en las orejas, ojos y boca se encuentran las zonas de mayor sensibilidad debido a que cuentan con estructuras especializadas llamadas pelos táctiles (Aira e Ibáñez, 2013).

Estos pelos táctiles o vibrisas, como por ejemplo los bigotes, nunca deben ser cortados, debido a que tienen una elevada sensibilidad y cumplen funciones importantes de recepción de mensajes específicos que se envían al cerebro. Dentro de sus funciones resalta la percepción de posibles objetos u obstáculos cercanos, por ejemplo al detectar el alimento antes de que sus labios puedan tocarlo (McBane, 2012).

Figura 7. Acicalamiento (Pavo, 2024).

Las zonas de la cruz, alrededor de la cincha, los flancos, debajo de la cola, la zona de los genitales y glándula mamaria de igualmente son zonas que se deben manejar con cautela ya que presentan una alta sensibilidad. En muchos casos los equinos requieren de entrenamiento especial para que las personas puedan tener acceso a la parte inferior de las patas (McBane, 2012).

Referencias

Aggro. (29 de enero del 2024). Reflexo de Flehmen em Cavalos. Aggro. https://aggro.com.br/reflexo-de-flehmen-em-cavalos/

Aira, N. & Ibáñez, M. (2013). Señales de comunicación de los caballos y su uso intraespecífico. El lenguaje corporal como elemento de comunicación en los caballos (I y II). https://www.produccion-animal.com.ar/produccion_equinos/produccion_equina_en_general/07-comunicacion_equinos.pdf

Bascuñana, S. (11 de setiembre del 2019). Sentido(s) común 2ª parte: olfato y gusto. Equi- libera. https://www.equi-libera.com/post/2019/09/11/sentidos-com%C3%BAn-2%C2%AA-parte-olfato-y-gusto

García, A. (Ed.). (2018). Fisiología veterinaria. Tébar Flores.

Jorge, D. (2021). Oftalmología. Hospital Veterinario Sierra de Madrid. https://hvsmveterinario.com/wp-content/uploads/2021/07/L-27-OFTALMOLOGIA.pdf

López, A. (2017). Alteraciones oftalmológicas hospitalarias en équidos. [Tesis de grado, Universidad de Extremadura]. https://dehesa.unex.es/bitstream/10662/6755/1/TFGUEX_2017_Lopez_Aranda.pdf

McBane, S. (2012). Horse Senses. Manson Publishing Ltd. https://www.vet-ebooks.com/horse-senses/

Moriello, K. (2019). Estructura y función del oído en los caballos. Manual de MSD, Manual de veterinaria. https://www.msdvetmanual.com/es/propietarios-de-caballos/trastornos-del-o%C3%ADdo-de-los-caballos/estructura-y-funci%C3%B3n-del-o%C3%ADdo-en-los-caballos

Ortuño, L. (2020). MANUAL BIENESTAR EQUINO C.R.E.W. http://www.senasa.go.cr/informacion/centro-de-informacion/informacion/sgc/pnbaep/4517-manual-de-bienestar-equino-crew/file

Pavo. (2024). La comunicación con el caballo: los 5 sentidos. Pavo. https://www.pavo-horsefood.es/blog/la-comunicacion-con-el-caballo-los-5-sentidos/69

Pixabay. (s.f.). Imagen de Orejas, Caballo, Animal. Pixabay. https://pixabay.com/it/photos/orecchie-cavallo-animale-natura-4640525/

Prado, J. (2009). Doma racional sin violencia en equinos. [Tesis de grado, Universidad de Magallanes]. http://www.umag.cl/biblioteca/tesis/prado_jose_2009.pdf

Simó, P. (26 de julio del 2023). Curiosidades de la visión de los caballos. IVO, Oftalmología veterinaria. https://ivoft.com/blog/curiosidades-de-la-vision-de-los-caballos/

Tula, R. (2011). Etología equina. Primera parte. Visión Rural, 18(89),39-42. https://www.produccion-animal.com.ar/etologia_y_bienestar/etologia_en_general/08-Etologia_Equina.pdf

Valero, M. & Martín, M. (2019). Uveítis recurrente equina (ERU). ExtremaduraPRE: la revista de la Asociación Extremeña de Criadores de Caballos de Pura Raza Española (32), 64-67. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6946837

Werner, M., Bustamante, H., Tadich, T., Uberti, B., Durán, C. & Gajardo, G. (2022). Manual de buenas prácticas. Crianza del caballo raza chilena. https://veterinaria.uach.cl/wp-content/uploads/2022/06/ManualBP_FedCriadores_PDF.pdf